lunes, 15 de marzo de 2010

Soy gilipollas por que trabajo para un gran Gilipollas

Hola.
Realmente me gustaría que eso pasara... Entro a su despacho con cara somnolienta (no hace falta lo del camisón blanco), me quedo de pie mirándole fijamente (todo lo que las lagañas me permiten) hasta que para de parlotear por su móvil y se gira para mirarme. Entonces, pausadamente y antes de que empiece a chillar como una niña, le señalo con el índice y le digo con voz cavernosa: "USTED MORIRÁ EN SU NAVE ESPACIAL", acto seguido me saco la chorra y me meo en su escritorio.
Me fascina. En ese momento no sé si podría contener mi relajado esfínter y propeler un sonoro pedo que sería el broche final para esta maravillosa escena. Increíble. No harían falta más palabras ni por uno, ni por otro lado, sobrarían. Sería poesía pura escuchar el delicado precipitarse del chorrillo sobre su mesa llena de carpetitas blancas. Puedo imaginar esa cara de albano-kosovar torcida en un gesto de incomprensión y terror profundo... Fantástico.